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Pendientes realizados en azurita con malaquita de gran calidad y engarzados en plata 925 mm.
Miden 3,2 cm de largo incluido el gancho. La pieza de azurita con malaquita mide 1,8 cm de largo
PIEZA ÚNICA
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La azurita ha sido siempre una piedra sagrada para los indígenas Norte Americanos, siempre han usado este mineral para contactar con los guías espirituales indígenas. En Egipto la azurita fue un símbolo de status social y espiritual.
La azurita es una poderosa piedra curativa que facilita la comprensión psicosomática del efecto de la mente y las emociones sobre el cuerpo. Se cree que la azurita es la piedra de la memoria, si se lleva como colgante esta piedra ejerce como recordatorio.
Se dice que la azurita alivia el nerviosismo, limpia el estrés, la pena, a preocupación y la tristeza.
La malaquita es una de las gemas más antiguas usadas por diferentes civilizaciones por sus propiedades sanadoras y transformadoras. En la Antigüedad, los romanos la utilizaban como talismán para protegerse de los rayos, las caídas y los accidentes. En tiempos del antiguo Egipto, hacían un cosmético verde para los párpados, con los polvos de la malaquita, que utilizaban para neutralizar los temidos efectos del mal de ojo. Las personalidades destacadas de Egipto la preferían por su excepcional poder: se han encontrado hallazgos arqueológicos de ropas de faraones que incluyen incrustaciones de malaquita.
La malaquita posee una fuerte afinidad con la naturaleza y el reino de las plantas. Absorbe las radiaciones de cualquier tipo, limpia la contaminación electromagnética y curas las energías de la Tierra.
Pendientes cierre de presión realizados en labradorita y plata 925 mm
Pendientes de los 7 chakras realizados con piedras semipreciosas talladas y plata 925 mm
Pendientes realizados en cuarzo turmalinado y plata 925 mm
